Perelman arrancó de una concepción fuertemente no cognoscitivista de la moral [ ] pero no dio el paso a una posición objetivista [ ]. Y no lo dio, en mi opinión, por su aversión al absolutismo filosófico y moral, que le llevó a defender un pluralismo de corte relativista [ ]. Este ha sido el caso en relación con Perelman. En su obra me encontré con ideas y conceptos que no me satisfacían plenamente [ ] pero que me han acompañado, yo diría, desde siempre [ ] sobre todo [ ] la argumentación (o razón práctica), en cuanto instrumento que debería permitirnos ocuparnos de los problemas prácticos, de la praxis humana, evitando tanto el irracionalismo como la violencia.