PALLEIRO BARBEITO, R. / CANEDA RENDO, S.
La inmensa mayoría de las empresas familiares son pequeñas y medianas empresas (comúnmente denominadas Pymes) cuyas preocupaciones no son únicamente las del ámbito comercial, sino que también se refieren al aspecto organizativo y legal.
Actualmente, garantizar una apropiada sucesión empresarial, optimizar la gestión de sus actividades, conseguir la fórmula más eficiente fiscal y financiera son, entre otras, unas de las inquietudes más comunes a todas las Pymes.
A través de las operaciones de reestructuración lo que se pretende es mejorar la organización a nivel comercial de servicios y productos, aprovechar los recursos disponibles, diversificar la actividad y el riesgo, con el fin de evitar el embargo del patrimonio personal de los socios.