La convivencia, sin ser un objetivo que haya formado parte de la tradición educativa, ha ido tomando fuerza en las últimas décadas y ha pasado a ser considerada como un aspecto nuclear y un indicador de calidad de la educación.
Así, es importante en este contexto actual presentar una obra que desarrolle los tres aspectos fundamentales en los que se debe centrar toda intervención en materia de convivencia escolar:
La convivencia como objetivo educativo y como dimensión formativa amplia y enmarcada en la educación integral.
La convivencia como elemento de calado en la estructura organizativa y curricular del centro.
La convivencia como un clima social en el que vivir juntos es el eje sobre el que pivota la acción educativa, estando apoyada en el respeto a las diferencias, la no violencia y la resolución pacífica de los conflictos.
Es además relevante, pues en esta obra Carlos Monge López como coordinador nos ofrece un panorama amplio y diverso de evidencias teórico-prácticas que permiten seguir avanzando en la fundamentación científica del constructo de la convivencia escolar...