El aumento de la conflictividad en los supuestos de ruptura de pareja que se ha producido en los últimos años, no ha ido acompañado de una reforma de las normas sustantivas y procesales que permita abordar de una forma adecuada estas situaciones que afectan a la esfera más íntima de las personas y cuyas consecuencias se extienden muy especialmente a los hijos.
Este libro contiene una perfecta radiografía sobre cómo se está actuando en la práctica, destacando las dificultades que se derivan de la inadecuación de la actual regulación, ofreciendo respuestas a los problemas prácticos que ello ocasiona y abogando por soluciones ante las dificultades de aplicación. Por todo ello, resulta de indudable interés tanto para los operadores jurídicos como para los profesionales y estudiosos de la mediación familiar.