La causa se ha convertido en una de las instituciones más controvertidas de nuestro Derecho contractual. En el plano teórico, la doctrina española ha acumulado múltiples intentos de explicación sin lograr un consenso claro, hasta llegar a una situación en la que las corrientes más influyentes se inclinan por seguir la senda de otros ordenamientos civiles europeos y suprimir esta figura.
En el plano práctico, sin embargo, nuestros tribunales continúan ampliando su aplicación para cumplir funciones muy diversas, algunas de ellas incluso contradictorias entre sí. A ello se suma que, desde la perspectiva del Derecho comparado, los sistemas que habían prescindido de la causa vuelven a cuestionar la corrección de esa decisión, manifestándose un renovado interés por esta institución en la ciencia jurídica europea.