La electricidad y telecomunicaciones son los servicios peor valorados por los consumidores, siendo el principal motivo de esta insatisfacción los elevados precios de los mismos. Ello denota la necesidad del rol fundamental que el Derecho de la competencia debe seguir jugando para avanzar en el camino de garantizar un adecuado nivel competitivo en estos mercados y, a la postre, menores precios. La obra se dirige a todos aquellos que operan y están interesados profesionalmente en los sectores de energía y telecomunicaciones.